La salud mental no es solamente la ausencia de trastornos psicológicos, sino que engloba el bienestar físico, psicológico y social de la persona. Por tanto, la salud mental es requisito indispensable para una buena salud del individuo, ya que le permite un correcto manejo del estrés y una adecuada adaptación a las demandas del día a día.
La ausencia de salud mental compromete la salud global del individuo, pudiendo presentar enfermedades que con el tiempo y sin un correcto abordaje se pueden llegar a cronificar. Por el contrario, contar con salud mental aumenta el rendimiento y la productividad a nivel laboral, mejora las relaciones interpersonales, mejora la salud física y fomenta pensamientos positivos.
¿Qué podemos hacer para mantener una buena salud mental? A continuación se exponen algunos de los factores de salud mental.
- Tener un nivel de actividad adecuado: el equilibrio entre la actividad física y la actividad mental fomentan una sensación de satisfacción personal.
- Cuidar las relaciones sociales: mantener buena relación tanto en el ámbito familiar como en el círculo de amigos favorece nuestro bienestar mental.
- Cultivar los pensamientos positivos: pensar de forma negativa interfiere sobre nuestra salud mental. Por tanto, la práctica en pensamientos positivos sobre uno mismo, el entorno y el futuro promueve la salud mental.
- Mantener un estilo de vida saludable: una correcta alimentación, el ejercicio físico de forma regular, un correcto descanso de 7 u 8 horas y el no consumo de sustancias nocivas para la salud como son las drogas, el alcohol y el tabaco, disminuye la sensación de estrés y favorece un estado de ánimo adecuado.